Situada en un hermoso golfo rodeado de montañas, Palermo fue antaño un rico centro comercial fenicio en el Mediterráneo. El esplendor de la Antigüedad y las influencias de distintas dominaciones impregnan las rumorosas calles de la ciudad, donde el olor del mar se mezcla con el aroma de sorprendentes especialidades culinarias.

Los amantes de la playa no quedarán decepcionados, ya que la costa norte está poblada de playas armoniosas e impresionantes como Mandello, Addaura, Arenella, Punta Raisi, Cefalú y muchas más. Arena, rocas y arrecifes: ¡muchas opciones para todos los gustos!

La capital siciliana ofrece actividades durante todo el año. No sólo actividades acuáticas como paracaidismo y apnea, sino que gracias a la cadena montañosa que rodea la ciudad es posible practicar senderismo y montar en bicicleta de montaña siguiendo antiguos y olvidados senderos. Suba a la cima del Monte Pellegrino para disfrutar de una magnífica vista de la ciudad y la bahía.

Si su límite es el cielo, experimente el paracaidismo y el parapente acompañado por expertos locales: ¡la vista le dejará sin palabras!